Llegaron los vientos
de tus recuerdos
sobrevolando
las primeras nieves
del invierno.
Sobrevuelan los montes
jugueteando con las arestas
de las cimas mas altas
y los cuervos; ansiosos
le aguardan
batiendo las alas
al vuelo.
Se oyen;
Las graves voces de sus
fricciones en los estrechos;
Y el eco. Que cuando están,
no devuelve mis llamadas;
Aclamando verles. O olvidarles.
Hoy os observo, implacable.
Con la severidad del que
no tiene mas preguntas.
Seguro de querer estar allí.
Observandoles. En silencio.
Como se observa al miedo,
justo antes de enfrentarte a el.
O al pasado;
Cuando ya es demasiado tarde.